Perspectivas de la relación UE-Gibraltar

27 de Diciembre de 2020

 

 

Si hay una cuestión en la que los niveles local y europeo se dan la mano esa es la de Gibraltar y con ella la de La Línea de la Concepción.

Gibraltar cuenta con un protocolo específico en el Acuerdo de Retirada del Reino Unido de la Unión Europea que, a excepción de su artículo primero relativo a los derechos de los ciudadanos, expira el próximo 31 de diciembre coincidiendo con la finalización del período de transición.

Los gobiernos de España, Gibraltar y el Reino Unido (éste último en calidad de Estado que se ocupa de la política exterior y de defensa gibraltareña) mantienen actualmente conversaciones que consideran constructivas sobre cuestiones relativas a las relaciones futuras de Gibraltar con la Unión Europea sin que por el momento hayan conseguido alcanzar un acuerdo que evite que a partir del 1 de enero de 2021 las relaciones de Gibraltar con la Unión Europea queden en el limbo y los tránsitos en la frontera reciban el tratamiento de cualquier frontera exterior.


Foto: Juan Franco, Alcalde de La Línea, y Fabian Picardo, Ministro Principal de Gibraltar, en conferencia de prensa

 

La Ministra española de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, Arancha González Laya, aseguró que España seguirá buscando un acuerdo sobre las relaciones UE-Gibraltar. En este mismo sentido se han manifestado el FCO británico y el Gobierno gibraltareño. 

La Ministra González Laya se refirió a Gibraltar en el transcurso de unas declaraciones en las que indicó que para España es motivo de alegría que hayan concluído las negociaciones sobre la relación futura Unión Europea - Reino Unido antes de plazo porque eso permite encarar la nueva relación desde la tranquilidad y la estabilidad.

 



Ministra española de AAEE, UE y Cooperación, Arancha González Laya © MAEUEC 2020


La intransigencia de Madrid y Londres en cuestiones relativas a Gibraltar alcanzó su apogeo europeo en el diseño e implementación de las políticas de la UE sobre el Cielo Único con un proyecto de ley de la Comisión para reducir la fragmentación del espacio aéreo europeo y mejorar el rendimiento del tráfico aéreo en cuanto a seguridad, capacidad, coste-eficiencia y protección del Medio Ambiente, bloqueado desde el año 2014 por la falta de acuerdo entre España y el Reino Unido en el seno del Consejo de la UE sobre su aplicación al aeropuerto de Gibraltar.

El sector del transporte aéreo proporciona empleo a casi 5 millones de ciudadanos UE y aporta 300000 millones de euros, o el 2,1%, al producto interior bruto de la Unión. Según Eurostat, 1.100 millones de personas viajaron en avión en la UE en 2018 (un 6% más que en 2017 y un 43% más que en 2010). Aunque el tráfico aéreo se redujo drásticamente en 2020 debido a la pandemia de Covid-19, Eurocontrol prevé que, en el escenario más optimista, el tráfico aéreo vuelva en el 2024 a los niveles de 2019.

En Gibraltar, donde el 96% de la población votó en el referéndum de 2016 a favor de permanecer en la Unión Europea, su Gobierno apuesta por la adhesión al espacio Schengen de libre circulación de personas como fórmula para amortiguar los efectos negativos de la retirada de la Unión sobre los tránsitos en la frontera, una adhesión que podría producirse, bien a través de un acuerdo bilateral con España (que tradicionalmente sólo negocia asuntos gibraltareños con el Reino Unido), teniendo el acuerdo que ser aprobado posteriormente por la Unión Europea (Schengen está integrado en el acervo de la UE), bien en negociación directa del Reino Unido con la Unión Europea, una vía esta poco probable toda vez que España es un Estado miembro.

Un ejercicio diplomático interesante puesto que Gibraltar, sin ser territorio UE, podría pasar a convertirse en punto de acceso al espacio Schengen (como ocurre actualmente con un número muy reducido de estados y microestados europeos no-UE) y el control practicado en los puntos de entrada a Gibraltar desde territorios terceros tendría que ser reconocido y compatible con el Código Schengen, razón por la que desde algunos ámbitos se sugiere la presencia en Gibraltar de la Guardia Europea de Fronteras y Costas que según se prevé estará operativa a partir del 1 de enero de 2021.

De acuerdo con el mandato conferido al equipo de la Comisión Europea para negociar en representación de la Unión, lo dispuesto en el reciente Acuerdo de 24 de diciembre sobre Comercio y Cooperación entre la Unión Europea y el Reino Unido, que habrá de gobernar la relación futura entre ambas partes tras su ratificación y entrada en vigor, el Acuerdo no será de aplicación en Gibraltar ni tendrá efectos sobre ella, sin que esto excluya la posibilidad de que en el futuro pueda celebrarse un acuerdo separado entre la UE y el Reino Unido en relación con Gibraltar, según indican fuentes de la Comisión Europea.